No son pocos los que sueñan con tener una tablet o comprar un smartphone de moda y con excelentes especificaciones, pero no todos pueden permitírselos. Aunque siempre es posible encontrar ofertas, lo cierto es que suele ser complejo localizar un celular de alta gama a un precio más o menos asequible. Aun así, existen varias opciones para conseguir uno de estos anhelados terminales y no sufrir para llegar a final de mes.
Si eres de los que prefiere optimizar sus gastos antes que presumir con productos de última generación, te contamos que comprar un smartphone o tablet de segunda mano es una alternativa bastante acertada, por eso aquí queremos compartir algunos detalles a tener en cuenta antes de adquirir tu próximo dispositivo móvil.
1. ¿Segunda mano o reacondicionado?
Adquirir un teléfono de segunda mano es algo que suele traer más problemas que ventajas. Si bien el precio del celular puede estar rebajado hasta un 40%, siempre en función del uso que se le haya dado y los fallos que dé su sistema, la mayoría de las veces no tendremos garantía. Es más, si adquirimos este teléfono de un particular, probablemente no volvamos a verle ni a contactar con él.
Otra opción para adquirir un smartphone económico es comprarlo reacondicionado, algo similar a lo anterior pero con importantes diferencias. Un teléfono reacondicionado o refurbished es aquel que ha sido utilizado durante poco tiempo por su dueño. Por lo general, el comprador encuentra algún tipo de error de diseño en el celular y decide devolverlo al fabricante. Él se encargará de solucionar el fallo y venderá de nuevo el terminal a través de distribuidores.
Así pues, este teléfono de segunda mano podrá considerarse seminuevo y tendrá una rebaja aproximada de un 30% del precio original. Además, a diferencia del otro tipo de celulares usados, éstos contarán con garantía ante cualquier problema. Si te convence la idea pero no sabes cuál elegir, en T-Mobile puedes encontrar varios modelos, como por ejemplo el Samsung Galaxy S7 o el iPhone 6s, dos de los teléfonos más solicitados del mercado. Durante tiempo limitado, podrás beneficiarte de un gran descuento si te inclinas por el de Apple.
2. Consulta las especificaciones
El Galaxy S7 y el iPhone 6s tienen una calidad similar, así que podrás decantarte por uno u otro en función de tus preferencias. Ambos tienen dos cámaras principales excelentes de 12 MP y amplias pantallas de 5,1 y 4,7 pulgadas respectivamente, y su navegación es rápida y fluida. El Galaxy es una buena opción si estás acostumbrado al sistema operativo Android, además de que gana ligeramente en todos los aspectos y es sumergible. De todos modos, si prefieres iOS, el iPhone es una recomendable alternativa.
3. Funcionamiento del dispositivo
Comprar smartphones reacondicionados parece la solución perfecta a nuestros problemas económicos, pero no debemos olvidarnos de verificar que nuestro teléfono cumpla con todas las características que se le exige. Para ello, debemos asegurarnos de que la pantalla se ve bien y el táctil no falla; de que la cámara, el sistema de manos libres y los auriculares también funcionan.
Otro tema importante es verificar que el dispositivo funcione con las redes de tu país, no quisieras quedarte sin la funciones básicas de un teléfono solamente porque no te diste cuenta a tiempo de su incompatibilidad.
4. ¿Cómo es tu SIM?
Recuerda que, cómo en los modelos nuevos, es posible que tengas que adaptar el tamaño de tu sim al nuevo dispositivo ¿Es tu tarjeta SIM, Micro SIM o Nano SIM? El iPhone 6s y el Galaxy S7 incorporan Nano SIM por lo que tendrás que adaptar tu SIM si no dispones ya de ella. Tu operador podrá ayudarte en este proceso o facilitarte una nueva tarjeta.
5. Comprobar el número IMEI
Sobretodo en los teléfonos de segundo mano es muy importante conocer el número IMEI. Esta es la mejor forma de comprobar la autenticidad del teléfono y saber que el vendedor nos ha dado todas las garantías pertinentes por si tenemos algún problema con nuestro teléfono seminuevo.
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